14 de mayo de 2004
Los Equipos de Salud Mental y Derechos Humanos de Latinoamérica, abajo firmantes, repudiamos enérgicamente las torturas a las que los soldados norteamericanos e ingleses están sometiendo a los prisioneros iraquíes. La capucha, la picana, la tortura psicológica, son herramientas dolorosamente conocidas por todos nosotros y aunque nos repugna, no nos sorprende: el ejército norteamericano tiene larga experiencia en el uso de estos métodos tanto a través de intermediarios, los militares latinoamericanos por ejemplo, como en forma directa.
Mientras George W. Bush pretende convencer al mundo de que no conocía el tratamiento que se les da a los prisioneros, el nuevo responsable de las cárceles iraquíes, general Geoffrey Miller, concede casi graciosamente que a los detenidos se les quitará la capucha y no se les someterá a humillaciones pero puntualiza que los «métodos interrogatorios» se van a mantener.
Miller fue, antes de ser trasladado a Irak, jefe de la prisión norteamericana en la Base Naval de Guantánamo en la que permanecen arrestadas más de 600 personas a las que no se les permite asistencia legal y que han denunciado todo tipo de tormentos. Desde hace muchos años venimos denunciando los abusos cometidos por Estados Unidos en nombre de la paz y la libertad. Se trata de delitos sistemáticos contra la humanidad que merecen el más enérgico repudio y persecución.
- Denunciamos los graves efectos de la tortura sobre la salud física y mental de las víctimas directas, que tendrán consecuencias en las siguientes generaciones, como así también la afectación traumática para el conjunto de la comunidad mundial. La injusticia y la impunidad actuales tienen un impacto de retraumatizante en el psiquismo de las personas.
- Llamamos a la comunidad internacional a disponer de todos los recursos necesarios para una rehabilitación integral de las víctimas de tortura.
- Repudiamos el terrorismo que implica el genocidio de hombres, mujeres y niños por parte de la maquinaria militar más sofisticada del planeta, la destrucción de países, destrucción extendida al patrimonio histórico de la humanidad, la represión a los pueblos que luchan por sus derechos.
- Exigimos el retiro de las tropas de ocupación de Irak y el respeto de los derechos humanos en todos los lugares del mundo. Y el juicio y castigo de todos los responsables.
- Sostenemos el derecho a la autodeterminación del pueblo iraquí.
- Nos pronunciamos contra la tortura y por la defensa irrestricta de los Derechos Humanos.
CINTRAS -Centro de Salud Mental y DDHH- Chile
EATIP -Equipo Argentino de Trabajo e Investigación Psicosocial- Argentina
ECAP -Equipo de Estudios Comunitarios y Acción Psicosocial- Guatemala
GTNM/RJ Grupo Tortura Nunca Mas Río de Janeiro -Brasil
ITEI Inst. de Terapia e Invest. sobre las Secuelas de la Tortura y la Violencia Estatal -Bolivia
SERSOC – Servicio de Rehabilitación Social – Uruguay